Con la llegada del siglo XX, la celebración de las romerías en los distintos domingos de octubre comienzan a perder el esplendor de antaño. Tal y como recoge la prensa del momento, los componentes de las comitivas que partían desde Triana y Sevilla, que aportaban una gran parte de los romeros que asistían a la fiesta, no llegaban a alcanzar la Hacienda de Torrijos y honrar al Santísimo Cristo, ya que paraban continuamente en las numerosas ventas existentes en la Vega de Triana y en la cuesta del Caracol por mera diversión, dejando a un lado el fin religioso de la celebración. Coincidiendo con este hecho, la Santísima Virgen de la Estrella ocupaba un lugar privilegiado en la religiosidad popular de Valencina, entonces llamada del Alcor, que presidía todos los actos marianos a excepción de los dolorosos.
En 1923 se produce un hecho transcendental para la historia de ambas devociones. Dada la situación decadente en que se encontraba la devoción al Santísimo Cristo de Torrijos, a propuesta del sacristán D. Raimundo Pabón, se lleva a Nuestra Señora de la Estrella en procesión a la Hacienda de Torrijos con idea de revitalizar la romería. El éxito de aquella celebración fue rotundo, desplazándose todo el pueblo junto a su Patrona en una improvisada carreta tirada por dos bueyes "Ramito y Avellano" y rematada por un palio realizado con mantones de manila ideado por su entonces camarera, Dña. Petra Delgado. Para la organización de la romería se había creado una comisión encabezada por el sacristán D. Raimundo Pabón, que se encarga desde el momento de los cultos relacionados con el Santísimo Cristo de Torrijos y Nuestra Señora de la Estrella, conformando el germen de la futura Hermandad.
Tras años de gran esplendor, la irrupción de la II República conllevó la disolución de la comisión organizadora; no obstante, en el año 1934 se organiza la Romería de Torrijos bajo la iniciativa del alcalde D. Daniel Benítez Delgado, dejándose de celebrar al año siguiente dadas las tensiones políticas del momento. Temiéndose los desmanes producidos en otros lugares de la geografía andaluza con la profanación de imágenes sagradas, se ocultó a la Santísima Virgen en un hueco de escalera tabicado en el domicilio particular de D. Emilio Benítez desde el 19 de Marzo de 1936 al 5 de Enero de 1937. La Patrona fue trasladada a plena luz del día, simulando que llevaban cajas de flores artificiales en unas improvisadas parihuelas portadas por D. José Gómez Sánchez y D. Antonio Pabón Delgado, quienes llegando a poner en riesgo sus vidas pasaron desapercibidos providencialmente. Al pertenecer a una finca privada y dada su particular unión al retablo, la Imagen del Santísimo Cristo de Torrijos no fue ocultada ante estos hechos, pero sí vigilada por varios vecinos.
Una vez finalizada la contienda civil, se vuelve a retomar con entusiasmo todo el movimiento en torno a la Romería de Torrijos, culminando con el nacimiento de la Hermandad del Santísimo Cristo de Torrijos y Nuestra Señora de la Estrella en 1943, aprobándose sus primeras Reglas el 10 de Junio de aquel mismo año por la Autoridad Eclesiástica.
Desde entonces la vida de la Hermandad se ha desarrollado con mucho entusiasmo, no sin dificultades dada la escasez de recursos económicos de nuestro pueblo en estos años, pero todo se ha solventado gracias al cariño que pone todo el pueblo en aquello que tenga relación con la Santísima Virgen de la Estrella, a la que desde siempre se ha tenido como Reina y Protectora.
Cinco años después de la erección canónica de la Hermandad, el 14 de Febrero de 1948 se autoriza el cambio de denominación de Valencina del Alcor a Valencina de la Concepción por resolución del Ministerio de la Gobernación, accediendo a la solicitud emitida por el Ayuntamiento de la localidad. Este hecho reafirma la tradición concepcionista de un pueblo que conmemora de esta forma ser el primero en repicar las campanas el 8 de Diciembre de 1854. Ese mismo año, la romería se celebra el tercer domingo del mes de octubre para no coincidir con las celebraciones del VI centenario de la conquista de Sevilla. En 1958, diez años más tarde, por el fallecimiento del Papa Pío XII, se traslada nuevamente su celebración al tercer domingo. Previamente, en 1952 se había estrenado la carreta realizada en carpintería por D. Roque Delgado y por el orfebre D. Manuel Domínguez en alpaca plateada, cuyo diseño original contemplaba un templete de grandes dimensiones que cobijaría a la Santísima Virgen, posteriormente desestimada su ejecución.
En 1959 se nombra como Hermano Honorario de la corporación a D. José María Mendaro y Diosdado (†), octavo Marqués de Casa Mendaro, y como Camarera de Honor a Dña. María Josefa Diosdado y Armero (†), Dama de la Real Orden de Damas Nobles de la Reina María Luisa.
Con la llegada de la década de los años 60, la Hermandad reaviva su día a día y continua afianzándose en el pueblo. Un hecho importante sucede en 1962, cuando se adquiere el solar primitivo de la Casa-Hermandad en la calle Azucena, originariamente destinado a almacén. En 1965 se restaura a la Santísima Virgen de la Estrella por el imaginero onubense Sebastián Santos Rojas, quien le realiza un nuevo juego de manos a semejanza del anterior. Este mismo año, se celebra por vez primera Torrijos Chico, la jornada de Acción de Gracias, trasladando el estandarte del Santísimo Cristo a la Hacienda el último domingo de octubre.
En la década de los 70 se produce uno de los cambios más destacables en la concepción de la forma de procesionar a la Patrona, estrenándose en 1972 el actual paso procesional ideado para ser portado por costaleros, quedando en desuso el modo tradicional de carga propio del Aljarafe, consistente en llevar las andas a hombros mediante grandes maniguetas externas. Del primitivo paso procesional se conserva la peana que actualmente procesiona el Domingo de Resurrección, obra realizada en el siglo XIX.
El año 1981 acoge la creación de tres importantes grupos de la Hermandad: el Grupo Joven, la cuadrilla de hermanos costaleros y el Coro. Estos colectivos están muy presentes a día de hoy con la vida de la Hermandad y demuestran su compromiso con todos los actos y cultos que se realizan a lo largo del año. Tristemente desaparecida, este mismo año se crea la Banda de Cornetas y Tambores de la Hermandad, que muchos años abrió paso a la comitiva de la romería bajo la dirección de D. Juan A. Hidalgo y de D. José Delgado Arellano. Al año siguiente, el Excmo. y Rvdo. Sr. Cardenal Fray Carlos Amigo Vallejo, Arzobispo de Sevilla, preside la Misa de Alba.
Las primeras elecciones celebradas por sufragio universal se celebran en el año 1983, siendo elegido como Hermano Mayor D. Manuel Delgado Pabón. A lo largo de su mandato se estrenan las actuales andas de romería de la Santísima Virgen, realizadas siguiendo el diseño de Talleres Villarreal, donde es restaurada la carreta dos años después. En 1987 se recupera la celebración del día de Acción de Gracias, conocido como Torrijos Chico, tradición del último domingo de octubre perdida en la década anterior. Tras la modificación de las Reglas para adaptarlas a las nuevas normas diocesanas de Hermandades y Cofradías, el 19 de Noviembre de 1988 son aprobadas por el Vicario General de la Archidiócesis. En la Novena del año 1989 se estrenaría la Salve a Nuestra Señora de la Estrella, compuesta por D. Francisco José Pavón Arellano, siendo el himno que Valencina entona en cada celebración religiosa de la Hermandad en la parroquia hacia nuestra Madre.
En 1991 se restaura y amplía el paso procesional por el dorador D. Antonio Díaz, autor del mismo. Al año siguiente se inician las obras de la nueva Casa-Hermandad y tiene lugar un hecho insólito en la historia de la Romería de Torrijos. Al no cesar la lluvia en la tarde-noche, la Junta de Gobierno decide que la Santísima Virgen pase la noche en la capilla de la Hacienda de Torrijos, la cual permanece abierta toda la noche para turnos de vela y oración ante los Titulares. A la mañana siguiente, la Patrona regresa a la parroquia portada en sus andas de plata a hombros de hermanos y devotos en un ambiente inigualable.
El L aniversario de las primeras Reglas de la Hermandad se celebra en 1993, elaborándose un completo programa de actos y cultos que se extiende desde enero hasta el mes de mayo, cuando se realiza la salida extraordinaria de Nuestra Señora de la Estrella en su paso procesional. Se da la circunstancia de que es la primera vez que el Niño Jesús procesiona en dicho paso, dando lugar a una estampa que en pocas ocasiones se ha repetido hasta la actualidad. En este mismo año se realiza el primer Rosario de la Aurora con la Virgen del Pilar para su traslado a la parroquia con motivo de la celebración de sus cultos en el mes de octubre. La romería se aplaza al martes 12 de Octubre dadas las malas previsiones meteorológicas que había para el segundo domingo del mes. El día de Acción de Gracias, el Exmo. y Rvdmo. Sr. Cardenal Fray Carlos Amigo Vallejo, Arzobispo de Sevilla, preside la Santa Misa y se inaugura el retablo cerámico conmemorativo del L aniversario de la Hermandad en el atrio parroquial.
En el año 1994 se inauguran las nuevas dependencias de la Casa-Hermandad, una vez finalizan las obras iniciadas en 1992. Cuatro años más tarde, se estrena el Himno al Santísimo Cristo de Torrijos, cuya autora es Dña. Francis Pérez, entonándose al finalizar cada eucaristía que se celebra a los pies del Santísimo Cristo. En 1997 se inaugura el velero de la Hacienda, donde se depositan anualmente miles de velas por parte de los devotos de nuestro Amantísimo Titular, especialmente el día de la Romería de Torrijos. En el mes de Mayo del año siguiente, la romería recibe la declaración como Fiesta de Interés Turístico Nacional de Andalucía desde la Consejería de Turismo y Deporte de la Junta de Andalucía. En el transcurso del día de Acción de Gracias de 1998, la Hermandad nombra como Hermanos Honorarios a D. José Javier y Dña. Luisa Fernanda de Silva y Mendaro, Duque de Miranda y sexta Marquesa de Casa Mendaro (†), respectivamente.
Como culmen del siglo XX, en el año 2000, tan importante para la Fe cristiana, se conmemora el IV centenario del hallazgo del Santísimo Cristo de Torrijos, celebrándose en el patio central de la Hacienda el Solemne Pontifical presidido por el Excmo. y Rvdo. Sr. D. José Antonio Infante Florido, Obispo Emérito de Córdoba. Como novedad y con una acogida abrumadora de hermanos y devotos, se celebró el primer Solemne Besamanos del Santísimo Cristo.